El martes 21 de octubre, la abogada de inmigración Lea A. Salama DiMitri, de Behar Law Group, se reunió con Griselda Flores, editora senior de Billboard Latin, durante una mesa redonda en la Semana Billboard de la Música Latina de 2025. Ambas analizaron la complejidad cada vez mayor de las políticas migratorias y las restricciones de visas para músicos internacionales, en particular la alarmante tendencia a la revocación de visas entre artistas de la música regional mexicana y otros sectores.

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La conversación, que reflejó los desafíos que enfrentan los artistas latinos al gestionar los trámites migratorios en Estados Unidos, destacó los estrictos requisitos para las visas O y P (visas de no inmigrante diseñadas específicamente para artistas, atletas y artistas), así como los crecientes riesgos asociados a retrasos y denegaciones. Salama DiMitri, una experimentada abogada de inmigración, enfatizó la dificultad y los múltiples procesos que implica obtener estas visas para artistas internacionales.

“La estructura migratoria es un proceso multiagencial y de múltiples pasos. No es para los débiles: es complejo y muy abrumador. No es como presentar una declaración de impuestos; el más mínimo paso en falso puede llevar a la aplicación de un proceso gigantesco”, explicó DiMitri. “La aplicación de la ley es la tendencia más importante en este momento”.

Flores, quien ha informado extensamente sobre la ola de revocaciones de visas contra músicos de música regional mexicana, le pidió a DiMitri que brindara información sobre los músicos que interpretan narcocorridos (canciones con temas de crimen organizado o narcotráfico) y si sus letras podrían ser objeto de escrutinio bajo las políticas de seguridad nacional de Estados Unidos. “cantar narcocorridos puede verse como un impedimento a la libertad de expresión”, señaló Flores. “Al mismo tiempo que se han revocado estas visas, especialmente para los artistas de música regional mexicana”.

DiMitri reconoció esta posibilidad y explicó que múltiples factores, como las actividades de un artista en redes sociales o supuestas afiliaciones políticas, ahora pueden influir en el proceso de aprobación de visas. “El Departamento de Estado de Estados Unidos comenzó recientemente a exigir a los solicitantes de visas O y P que revelen sus perfiles en redes sociales”, explicó. “Con la evolución de la tecnología y la inteligencia artificial, los algoritmos analizan la presencia en línea de las personas como parte del proceso de verificación. Estas medidas pueden utilizarse para evaluar si las opiniones de alguien, o incluso su contenido artístico, representan una amenaza percibida para la seguridad nacional”.

“Para una visa O-1, los solicitantes deben demostrar una ‘capacidad extraordinaria’, lo cual puede demostrarse mediante reconocimiento nacional e internacional; por ejemplo, si un artista ha ganado un premio Grammy o ha alcanzado un logro significativo. Pero incluso con ese nivel de reconocimiento, existe un factor discrecional” —enfatizó DiMitri—. “Cualquier infracción mínima, ya sea relacionada con actividad delictiva, pruebas insuficientes o incluso itinerarios incompletos, puede ser motivo de denegación o revocación”.

Teniendo en cuenta los desafíos actuales para obtener visas, DiMitri ofreció consejos aleccionadores a sus clientes: “Minimicen los viajes internacionales. Si salen de EE. UU. para visitar su país de origen, aumentan el riesgo de que les nieguen el reingreso, incluso si su visa fue aprobada inicialmente. El artista tiene la responsabilidad de demostrar su extraordinaria capacidad y garantizar el cumplimiento en todos los niveles”.

Con más de 30 años de historia, la Semana de la Música Latina es la reunión más importante y grande de artistas y ejecutivos latinos de la industria en el mundo. Coincide con los Premios Billboard de la Música Latina 2025, que se transmitirán el jueves 23 de octubre por Telemundo y Peacock, donde Bad Bunny será reconocido como el Artista del Siglo 21.



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